Es cierto que los sueños muchas veces nos transportan a un mundo mágico y, también es cierto, que no hay mejor sensación que tocar tu cama después de un día de mucho desgaste, pero, ¿alguna vez tuviste tanta pesadez como para dormir más de 24 horas seguidas?
En el 2007, un niño de Kentucky, EU, con apenas 7 años de edad, fue a dormir una noche como cualquier otra, pero a la mañana siguiente no logró despertar. Su mamá lo llevó de urgencia al hospital y, a pesar de realizarle diferentes estudios y tratamientos, el niño durmió durante ¡11 días seguidos!
El equipo médico utilizó como último recurso un tratamiento a base de anticonvulsivos que logró despertarlo, aunque después de tantas horas sin movimiento, Wyatt tuvo serias dificultades para hablar y caminar, por lo que fue sometido a una rehabilitación para recuperar su funcionalidad.
En el otro extremo tenemos el caso de Randy Gardner, que a los 17 años, se mantuvo despierto durante 11 días seguidos, en nombre de la ciencia; durante este periodo experimentó graves desórdenes mentales como: alucinaciones, paranoia y pérdida de memoria a corto plazo; esto, debido al alto desgaste neuronal que le provocó la falta de descanso.
Ningún extremo es lo que llamaríamos “saludable” y para tener una idea de los periodos ideales de descanso, dependiendo de la edad, mencionaremos que un lactante necesita en promedio dormir de 14 a 17 horas al día; mientras que un adolescente, entre 8 a 10 horas y, el periodo más largo de nuestra vida que es considerado como la edad adulta, necesitamos de 7 a 9 horas de sueño.
¿Sabes cuánto tiempo de tu vida pasarás durmiendo?
Si notamos que un tercio de nuestro día lo pasamos durmiendo, también significa que con una expectativa de vida de 90 años, vamos a dormir cerca de 30 años, en este caso la calidad importa mucho más que la cantidad y para eso necesitamos que nuestro lugar de descanso sea el óptimo, pero, ¿cómo podemos lograr eso? Te decimos cómo:
1. Una superficie que te dé un gran soporte: Las personas compran colchones basados en ofertas pero, pocas veces, nos ponemos a pensar en si es elcolchón ideal para nosotros; tal como un zapato, por más que esté en un excelente precio, no puedes comprar uno que te aprieta, ¿cierto?
2. Un colchón que se adapte a tu cuerpo: Los colchones con alta tecnología de espuma están diseñados para adaptarse a tu cuerpo y ofrecerte soporte en cada zona que lo necesitas, eso reduce dolores de espalda, mejor alineación de columna y evita la incómoda transferencia de movimiento.
3. Materiales que sean hipoalergénicos: No todos los colchones son de espumas de última generación y no todas las espumas tienen certificaciones que te aseguren ser libres de elementos tóxicos y protegen tu salud con facultades hipoalergénicas para evitar alergias y acumulación de ácaros.
El colchón Nezt está fabricado con Memory Foam, que es básicamente una espuma plástica que se amolda al cuerpo, pero a diferencia de muchos colchones de espuma este no se hunde, al contrario, da soporte a la espalda, cuello y hombros para que descanses profundamente
Este modelo es el original de la familia NeztSleep, una empresa 100% mexicana que está completamente comprometida con lograr que más personas puedan descansar cada noche mejor, por eso te ofrecen 101 noches de prueba y 10 años de garantía, para darte toda la tranquilidad de que su calidad es inigualable.
El colchón viene empacado al vacío dentro una caja, para darte un extra de practicidad con tu envío y la capacidad de que pueda entrar a cualquier hogar.
Puedes conocer toda su línea de productos desde edredones, sábanas, almohadas hasta un nuevo Topper para hacer más suave cualquier tipo de colchón.
Es tiempo de disfrutar tu descanso, simplemente entra a nezt.mx donde puedes hacer tu compra online y recibe tu nuevo colchón Nezt en la puerta de tu casa.Información Radio Fórmula