“La Ascensión al Empíreo” no es un cuadro cualquiera. Allá por 1490, El Bosco fue capaz de plasmar con su pincel la esencia de las almas llegando a un túnel luminoso, donde una persona parece estar esperándolas. Es una imagen que es fácil de asociar al fallecimiento, pero que va más allá: muchos expertos la asocian con las Experiencias Cercanas a la Muerte (ECM): Ahora, un equipo de científicos cree tener una explicación de por qué se producen.
Según un estudio presentado en el Congreso de la Academia Europea de Neurología en Oslo, Noruega, podría existir una conexión directa con los trastornos del sueño REM. La investigación sugiere que el 47 por ciento de los sujetos de análisis que sufrieron una ECM en algún momento de su vida, también han sido diagnosticados de algún tipo de trastorno relacionado con esta fase del descanso, como parálisis del sueño o alucinaciones.
Se trata de una investigación realizada en 35 países, en el que han participado un total de mil 034 personas.
A todos ellos se les presentó un cuestionario sin saber si habían experimentado algún tipo de ECM en algún momento de su vida y los datos fueron, cuanto menos, curiosos.
De ese millar de participantes, un 27% aseguraron haber vivido una experiencia de este estilo, es decir, 289 personas. Sin embargo, los expertos consideraron que solo 106 de ellos eran casos reales.
Para basar esta cifra, tuvieron en cuenta sus respuestas al cuestionario, además de una serie de características que todos ellos tenían en común: durante la ECM tuvieron una percepción anormal del tiempo, una sensación de que su cerebro funciona más rápido que habitualmente, tener una percepción sensorial excepcionalmente vívida y la sensación de estar fuera de su propio cuerpo en el momento en el que se produce la experiencia.
Es precisamente en estas 106 personas en las que se han centrado los expertos, para tratar de buscar características comunes que ayuden a echar luz a por qué se producen estas situaciones.
Momentos de dolor
Todos ellos tienen en común que las ECM se produjeron en momentos “especiales” de dolor, aunque en diferentes intensidades: mientras que la mitad afirman que se produjo en situaciones donde su vida estaba en riesgo, la otra mitad habla de situaciones como partos, ataques de ansiedad o dolor agudo.
El nuevo estudio no consigue explicar exactamente por qué se producen estas experiencias, pero sí han conseguido mostrar una correlación que hasta la fecha se desconocía.
Y es que los investigadores consideran que se produce una especie de intrusión del sueño REM en el despertar o, dicho de otra manera, parece que el cerebro tiene una actividad inusual antes de que el cuerpo se despierte, haciendo reales experiencias que solo se producen en nuestra mente.
Sin embargo, se desconoce qué es lo que produce realmente estas Experiencias Cercanas a la Muerte.
Otros estudios confirman que se produce un incremento de la actividad eléctrica cuando el cerebro entiende que está cerca de la muerte, mientras que otros afirman que la privación de oxígeno podría jugar un importante papel.
Sea como fuere la última investigación resalta dos características comunes en las personas que las han vivido: momentos de dolor y trastornos relacionados con el sueño.
Con información de El Español.