Cuando hablamos de seguridad, asaltos y violencia la percepción en buena parte del República Mexicana es que las cosas están cada vez peor. De ahí que el resto del país haya volteado a ver lo que está pasando en Yucatán, un estado que va a contracorriente del resto de México, al punto de ser considerada la entidad federativa más segura. Tal afirmación está basada no solo en cifras oficiales sino en estadísticas realizadas por la sociedad civil que dejan claro que el bajo nivel de violencia se debe en buena medida a las políticas implementadas ahí.
Estadísticas de seguridad inauditas
Un ejemplo de lo que pasa en Yucatán en términos de seguridad lo observamos en las estadísticas de uno de los delitos que más dolor provocan en una comunidad: el homicidio. Pese a que los índices de homicidios dolosos se han incrementado en gran parte de la República Mexicana durante los últimos meses, Yucatán conserva la etiqueta de la entidad con menor incidencia en este delito. De acuerdo con datos del Diario de Yucatán, el estado cerró el 2017 con 46 homicidios dolosos, es decir, la tasa de crímenes más baja del país: hablamos de 1.98 por cada 100 mil habitantes.
Contrario a lo que se podría pensar, la tasa de homicidio en el 2017 no es algo excepcional. A finales de abril del año 2018, Yucatán registró 15 homicidios dolosos. Dicho de otro modo, el estado tiene un promedio de cuatro homicidios al mes. Como comparación, durante el periodo de enero a abril de 2017, se reportaron 24 homicidios.
Existe cierto optimismo; si la tendencia se mantiene, Yucatán podría bajar la tasa de 50 homicidios dolosos que registró el año pasado y que hasta ahora es la más baja de la historia para la entidad.
Otras cifras de delitos de alto impacto también se reportan a la baja: homicidios culposos, secuestros, extorsiones, violación, robos con violencia, robos a vehículo, robos a casa habitación, robos a negocios y robos a transeúntes. Según la Fiscalía del estado, las mejoras relacionadas con seguridad se deben a los operativos, la estrategia y a los programas de prevención implementados.
De acuerdo con el reporte de Incidencia Delictiva del Fuero Común 2018 del Sistema Nacional de Seguridad Pública, durante el primer trimestre del 2018 en Yucatán se reportaron cero secuestros y 11 homicidios culposos, ambas cifras están muy por debajo del promedio nacional.
Las cifras de seguridad en Yucatán son sobresalientes, especialmente si las comparamos con el resto del país. Para muestra basta un botón: en enero del 2018 se reportaron 994 carpetas de investigación por presuntos delitos en el estado, es decir, cada día se cometieron 32 delitos. Por otro lado, durante ese mismo período a nivel nacional se denunciaron ante el Ministerio Público 146,561 hechos delictivos. Es decir que Yucatán registró solamente 6.8 % de las denuncias en el país.
El Escudo Yucatán, en búsqueda de una política integral de seguridad
En mayo del 2016, el entonces Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, declaró que el Gobierno Federal replicará a nivel nacional la estrategia de seguridad denominada Escudo Yucatán, que involucra a autoridades, sociedad civil, empresarios e instituciones educativas, según reportó El Financiero.
La estrategia Escudo Yucatán tiene tres ejes, de acuerdo con El Universal: la prevención social del delito; la reforma al marco normativo en el ámbito de la seguridad pública con penas más duras para los criminales; y una inversión de 1,500 millones de pesos para adquirir equipo sofisticado que refuerce la seguridad.
Quizá lo más destacable del Escudo Yucatán es su planteamiento integral que parte de la prevención del delito, relacionada con la preservación del tejido social. Para esta tarea se convocó a diversos sectores del estado: cámaras empresariales, sociedad civil, colegios de profesionistas, instituciones académicas y organismos públicos.
En el marco legal, la Jornada Maya reporta que ya se han presentado ante el Ejecutivo más de 11 iniciativas de ley para actualizar las normas, con el objetivo de endurecer las penas para delincuentes.
Dentro de la vertiente tecnológica de la iniciativa de última generación y capacidad analítica se tiene programado la distribución de 1,466 cámaras en todo el territorio estatal.
El veredicto de la sociedad civil
Actualmente la sociedad civil mexicana está más organizada y vigilante del actuar gubernamental en todos los niveles. Un caso particularmente interesante es Semáforo Delictivo, proyecto ciudadano que recolecta datos sobre denuncias y los presenta de manera muy clara como una herramienta de rendición de cuentas, evaluación y análisis de cada uno de esos delitos: les otorga un color específico, el rojo señala que el índice está por encima de la media histórica; el amarillo habla de niveles entre la media y la meta; y el verde de una meta de reducción alcanzada de 25% por delito.
De acuerdo con estos parámetros y según los datos revisados por Semáforo Delictivo, en los tres primeros meses del 2018, Yucatán estuvo entre los estados mejor evaluados e incluso en febrero fue el mejor. La entidad federativa fue calificada con seis luces verdes, de un total de ocho, tuvo los valores de menor impacto de todo México en rubros como homicidios, secuestros, extorsiones, robos a vehículos, casas y negocios, lesiones y violaciones.
Otros ejercicios de análisis dan cuenta de la situación de seguridad en Yucatán. Por ejemplo, Índice de Paz México (IMP) 2018 del Institute for Economics and Peace (IEP) –que reveló que el 2017 fue el año más violento que se tiene registro en México– lo plantea con claridad: “Yucatán se ubicó como el estado más pacífico de México” con una calificación de 1.167, muy por encima de estados como Guerrero y Baja California Sur con número por arriba de 4.
Al desmenuzar los datos arrojados por el estudio encontramos que Yucatán tiene la menor tasa de homicidio de México y la tercera tasa más baja de delitos con violencia. Además, su tasa combinada de robo, asalto y violación se redujo 23% durante el año pasado.
Asimismo, el impacto económico de la violencia en Yucatán es el menor de toda la República Mexicana, con tan solo 9,779 pesos. En comparación, el impacto económico por persona promedio en México es de 33,118 pesos. De acuerdo con este reporte, Yucatán es un modelo a seguir:
“Si el nivel de paz de cada estado mejorara alcanzando el nivel de Yucatán, el impacto económico de la violencia se reduciría a 1.65 billones de pesos o 9% del PIB de
México. Esto arrojaría un dividendo de paz de 3 billones de pesos que equivale a 16% del PIB de México”, se lee en el Índice de Paz México (2018).
El informe deja claro que la paz que impera en Yucatán no es producto de la casualidad. En otra de sus mediciones, el Índice de Paz Positiva, definida como el conjunto de actitudes, instituciones y estructuras que crean y sostienen sociedades pacíficas, Yucatán aparece en primer lugar. Se adjudica esta posición a dos causas: bajos niveles de corrupción y al buen índice en el libre flujo de información.
Yucatán obtuvo la segunda tasa más baja de actos de corrupción percibidos: sólo 28% de la población dijeron haber percibido actos de corrupción con frecuencia, en comparación con un promedio nacional de 44%. Aun así, las autoridades no se duermen en sus laureles. El estado ha adoptado medidas para combatirlo, por ejemplo, al establecer la Fiscalía Anticorrupción, según revela el Índice de Paz México (IPM).
Como los números lo demuestran, Yucatán está en una situación óptima en lo que a seguridad se refiere, sus cifras de delitos de alto impacto son algunas de las más bajas del país y siguen en descenso. Los otros estados tienen un referente en este sentido. Solo el tiempo dirá si políticas como las implementadas con el Escudo Yucatán podrían dar resultados en otras entidades federativas de México. Información Noticieros Televisa