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Por Francisco Garfias
El priista José Antonio Aguilar Bodegas, secretario del campo en Chiapas, veterano de mil batallas, hoy aspirante a la sucesión de Manuel Velasco en la entidad, frunció el ceño cuando le preguntamos si la eliminación de los candados para ser candidato presidencial del PRI es un traje a la medida del titular de la SHCP.
“¿Predestape de Meade?, no exageres”, dijo.
Sus palabras respondían a la multiplicada versión de que la eliminación del requisito de diez años de militancia para ser candidato presidencial, aprobada en la Mesa de Estatutos, es “un traje a la medida” del cinco veces secretario de Estado en los sexenios de Calderón y Peña.
Algunos ya aseguran que la importante reunión que los tricolores llevarán a cabo este sábado en el Palacio de los Deportes —La XXII Asamblea Nacional— “Es la de Meade”.
El buscapié cobró tal fuerza, que el mismísimo Enrique Ochoa tuvo que salir al paso. Dijo que la reforma que elimina los candados “no fue dedicada a persona alguna”.
“El propósito —precisó— es actualizar los Documentos Básicos para permitir la participación plena en política de los ciudadanos militantes del partido y de los ciudadanos simpatizantes del partido.”
Aguilar Bodegas no le resta méritos al secretario de Hacienda. Es inteligente, profesional, preparado. Ha dado sobradas pruebas de ser un buen funcionario. Pero no tiene arrastre, carece de estructura y podría dividir al priismo.
“Para que destaque en una campaña está cabrón”, sintetizó.
El político chiapaneco dice que hoy por hoy no se puede descartar a Osorio, Manlio, Eruviel, Videgaray, Nuño o Meade.
En el PRI hay consciencia de que para prevalecer y tener un mínimo de posibilidades de ganar es indispensable abrirse a la sociedad, ampliar la baraja.
Saben que ya no alcanza ni con el Verde, ni con Nueva Alianza. Por eso se abre camino la idea de los gobiernos de coalición.
“Basta de jugar a presidentes con 26 por ciento de apoyo”, nos dijo, alguna vez, el diputado Jorge Carlos Ramírez Marín, quien presidió la Mesa de Estatutos.
La idea de abrirse se precisa en el predictamen de la Mesa de Estatutos, aprobado en Campeche:
“En la diversidad pública de hoy, el diálogo, la inclusión, la construcción de acuerdos, la construcción de alianzas con los ciudadanos son medios necesarios para fortalecer la responsabilidad social de nuestra organización”.
Por cierto, hay que destacar la importancia de que Manlio haya ido a la mesa de Guadalajara (Visión de Futuro). Lo contrario habría extendido la percepción de que hay una ruptura interna.
La Mesa Visión de Futuro impulsó la eliminación del fuero en los servidores públicos y legisladores. Una demanda sentida de la sociedad.
Muy temprano hablamos del tema con Ivonne Ortega. Ella es la única mujer aspirante priista a la candidatura presidencial.
Se le escuchaba contenta por lo alcanzado en el predictamen de la Mesa de Estatutos. “De las cinco propuestas que llevamos, logramos cuatro y media”, nos dijo.
Ivonne festejó el fin del “chapulinazo pluri-pluri”, una propuesta que entregó a Enrique Ochoa.
En otras palabras, las personalidades del partido que brincan de una cámara a otra por la vía de la representación proporcional (ejemplo: Manlio-Gamboa) ya no podrán hacerlo.
Si un pluri quiere repetir, tendrá que buscar el escaño o la curul en una elección de mayoría.
Un este tema se ganó una batalla, pero no la guerra. El mismísimo Beltrones dice que este cambio puede ser impugnado.
Ivonne también siente que avanzó en el tema de “piso parejo” para candidatos, como ella, que no forman parte del grupo en el poder.
El tema de la consulta abierta para elegir al candidato presidencial, que empujan los inconformes, no será tratado en la XII Asamblea, sino en el Consejo Político del partido.
Rafa Márquez y Julión son tema de campaña. López Obrador incluyó al futbolista y al cantante grupero en su gira por Nuevo León.
El Peje lamentó su presunta vinculación con el narcotráfico, y que sean ese tipo de noticias las que imperen en el país.
“Todo lo que se sabe del territorio nacional en el extranjero tiene que ver con corrupción, narcotráfico y violencia”, puntualizó.
Julión, por cierto, admitió ayer que conoce al narcotraficante Raúl Flores —cosa que no hizo el primer día—, pero jura que no tiene vínculos con él.
El Departamento del Tesoro lo ubica como prestanombres del delincuente y lo incluyó en el organigrama del cártel de Los Flores.
Flores, por cierto, fue trasladado del Reclusorio Sur al Penal de Alta Seguridad del Altiplano, desde donde seguirá su proceso.
De vuelta con Aguilar Bodegas. Alguna vez se publicó que sería el candidato de Morena al gobierno de Chiapas en 2018. Tiene buena relación con gente cercana a López Obrador. Es muy amigo de los amigos de El Peje. Pero afirma categórico: “Voy a caminar por el PRI”.
Y eso que está convencido de que Morena es una verdadera amenaza para el PRI-Verde en Chiapas.
Sabe que no es el delfín del grupo que controla el CEN del PRI (conformado por los hombres de Luis Videgaray) ese privilegio lo tiene el cuestionado Roberto Albores Gleason.
Aguilar Bodegas está convencido de que Albores, desarraigado, se cayó. Para empezar, dice, fue elegido presidente estatal del PRI en la entidad por cuatro años y lleva seis. Por lo tanto, las acciones que ha llevado a cabo en el PRI en estos dos años no son válidas.
En la contienda por la candidatura PRI-Verde al gobierno de la entidad quedan vivos el delfín del gobernador Manuel Velasco, el presidente del Congreso local, Eduardo Ramírez, el famoso Willy Ochoa, el senador del Verde Luis Armando Melgar y el mismo Aguilar Bodegas. Información Excelsior.com.mx