“Hay que morir para vivir”
Valladolid.— Luego que a través de su cuenta de Facebook publicó mensajes donde dio a entender que terminaría con su vida, las primeras horas de ayer Jesús Jiménez Sabido, de 19 años, se suicidó al colgarse con una cuerda que ató en una madera del corredor de su casa, en la calle 32 entre 43 y 45 del barrio de Santa Ana.
Una de las frases que escribió apenas hace tres días fue “hay que morir para vivir, si el grano de trigo no muere, si no muere, solo quedará”.
Entre sus amigos le comentaron que no se preocupara pues las cosas pasan, pero no se entendió el motivo por el cual le escribieron.
Se presume que hacía alusión a que había terminado con alguna novia y eso lo mantenía agobiado.
Con una cuerda
Jiménez Sabido estaba en su casa pero nadie se percató del momento en que salió al patio, amarró una cuerda en un tinglado que está en la parte posterior de la vivienda y se colgó.
Cuando su familia lo estuvo buscando no lo encontraron en el interior y al salir al patio se llevaron la sorpresa de verlo colgado, de inmediato lo bajaron pero ya no tenía signos vitales.
Los hechos ocurrieron ayer, después de las 12 de la noche, una hora y media después personal del Semefo y peritos de la Fiscalía levantaron el cadáver.
Varios vecinos cercanos señalaron que no se percataron del movimiento hasta ayer al amanecer que se enteraron de la situación y lamentaron los hechos ya que Jiménez Sabido “era un joven tranquilo” y no sabían si tenía algún problema.
De acuerdo con datos obtenidos, el suicida era estudiante en el Centro Universitario de Valladolid (CUV), los fines de semana trabajaba manejando un taxi del Frente de Trabajadores del Volante Adalberto Aguilar Osorio.
Según se averiguó, vivía con sus padres Amelia Sabido y Eduardo Jiménez Guillermo, quienes perdieron de forma trágica a su hijo. Información Diario de Yucatán