Como muchos sabemos, el altar de muertos es una representación y tradición que llevamos a cabo los días 1 y 2 de noviembre como ofrenda a nuestros seres queridos que ya no se encuentran con nosotros.
Dichos altares están conformados por siete escalones o niveles y representa los pasos necesarios para llegar al cielo y poder “descansar en paz”, así como la visión de que existe un mundo terrenal y espiritual. Cada uno de estos niveles tiene un significado y te explicamos a continuación:
Primer Nivel
En este nivel se coloca la imagen del santo del que se sea devoto.
Segundo Nivel
Está dedicado a las ánimas del purgatorio y sirve para que el difunto tenga permiso para salir de ese lugar.
Tercer Nivel
Se coloca sal en este nivel para purificar el espíritu y para que no se corrompa el cuerpo.
Cuarto Nivel
Va el pan de muerto y representa la eucaristía, (trata de un ritual donde los representantes consumen pan y vino haciendo énfasis en la última cena, y que consideran que canaliza la gracia divina).
Quinto Nivel
En este nivel se coloca la comida y fruta favorita del difunto
Sexto Nivel
Aquí va la foto del difunto al que se le dedica el altar.
Séptimo Nivel
En este último nivel se coloca una cruz formada con cal, frutas o semillas y sirve para que el difunto expíe sus culpas
Los altares de muertos están compuestos por diferentes elementos:
Arco. Representa la entrada al mundo de los muertos y está adornado con flores y, en algunos casos, frutos.
Representación de los elementos naturales. El viento está representado por papel picado. Un vaso de agua sirve para calmar la sed del espíritu. El fuego se representa con velas, veladoras y cirios encendidos. La tierra, con semillas y frutos.
Aromas. El copal era considerado una esencia sagrada en las culturas prehispánicas y suele ser un elemento indispensable en el altar de muertos. Otros aromas presentes son: flores de cempasúchil, infusiones de hierbas como laurel, tomillo y romero.
Alimentos. Deben ser del agrado del difunto. Tradicionalmente, platillos típicos como el mole y los tamales. Las calaveritas hechas de azúcar, chocolate o amaranto representan que la muerte puede ser dulce. El pan de muerto es un elemento moderno de los altares. También se colocan bebidas alcohólicas que el difunto disfrutaba como cerveza, tequila o pulque.
Objetos personales. En los niveles terrenales, suelen colocarse pertenencias del difunto, especialmente si eran objetos queridos y apreciados. También se acostumbra a colocar una fotografía del occiso en la parte central.
Simbología religiosa. Ocupa los niveles superiores del altar y está conformada por cruces, figuras y estatuillas de santos, vírgenes y ángeles. Información Excelsior.com.mx