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MÉRIDA, Yuc., 28 de febrero 2024.- Especialistas del Hospital General Regional (HGR) No. 12 “Benito Juárez García”, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán, salvaron la vida de doña Mónica “M”, quien sufrió un Evento Vascular Cerebral (EVC) y hoy, gracias al Protocolo de Atención Integral “Código Cerebro” tiene una nueva oportunidad de vida.
Y es que los Eventos Cerebro Vasculares pueden cambiar la vida de las personas en segundos, son la segunda causa de muerte y la tercer causa que provoca una discapacidad, por tal motivo, a casi dos años de la implementación del Programa Código Cerebro, a cargo del director general del Seguro Social, maestro Zoé Robledo, hoy opera a nivel nacional en 10 Unidades Médicas de Alta Especialidad (UMAE) y 136 hospitales de segundo nivel, entre ellos el HGR No. 12 en Mérida, donde doña Mónica recuperó 95% de su movilidad.
Fue en el mes de abril del año pasado, cuando antes de dormir, doña Mónica se desvaneció. Su esposo se percató de que la mitad de su cuerpo se encontraba paralizado y no podía hablar con coherencia. En seguida, la trasladó al servicio de Atención Médica Continúa de la Unidad de Medicina Familiar No. 20, donde fue atendida y canalizada al área de Urgencias del HGR. No. 12.
“Cuando me acosté a dormir sentí algo en mi brazo que estaba entumido. Tenía muchas ganas de vomitar y de ir al baño, no lo podía controlar. Ya no podía hablar, arrastraba las palabras y me costaba entender lo que estaban diciendo”, describió la paciente.
Al llegar al hospital, un grupo interdisciplinario de especialistas ya la esperaban e inmediatamente activaron el “Código Cerebro”, el cual permite que las y los pacientes con cualquier EVC, tengan una atención rápida y eficaz para salvaguardar su vida y otorgarle en el menor tiempo posible, el tratamiento oportuno y adecuado para su pronta recuperación.
“Un EVC es cuando se sufre una interrupción súbita del flujo sanguíneo en cierta parte del cerebro. El cerebro no duele y también se infarta, y dependiendo de la zona que se infartó, es la afectación que el paciente va presentar. Por eso la importancia del Código Cerebro, porque permite tratar a las y los pacientes desde el inicio de los síntomas; tenemos hasta 4 horas y media para ofrecer una alternativa terapéutica para este tipo de padecimiento”, aseguró el doctor Ángel Solís Buenfil, subdirector del HGR No. 12.
Así fue como doña Mónica, maestra de profesión, fue atendida en urgencias en donde se le suministró el tratamiento adecuado para preservar su vida, después fue trasladada a terapia intensiva donde continuó en cuidado médico y fue sometida a una terapia de recanalización, a continuación se restableció su flujo sanguíneo para que volviera a entrar en su función, y posteriormente, se le brindó rehabilitación y el tratamiento necesario para su recuperación, la cual fue de 95%.
“Todas estas neuronas que se salvaron y la zona que se perdió o zona del infarto, necesitan hacer conexiones posteriores y, se llama neuroplasticidad, tenemos hasta 3 meses para llegar al pico de funciones de recuperación máxima que va tener nuestro paciente, es una labor del Instituto y de la familia, como también a nivel familiar, que conlleva al paciente a sus citas y la rehabilitación”, agregó el doctor Solís Buenfil.
Y es que la prevención y el papel de las y los familiares y de la gente más cercana son vitales, en el momento de identificar los síntomas iniciales de un accidente cerebro vascular:
“Es importante acudir a nuestra Unidad de Medicina Familiar para llevar bien nuestros controles y si desafortunadamente, en algún momento, identificamos los signos de la estrategia CAMALEÓN: cara colgada, mano pesada, lengua trabada, debemos llevar al paciente inmediatamente para una valoración” agregó.
Como resultado de la atención médica oportuna, del seguimiento, y rehabilitación tras las intervenciones quirúrgicas, Doña Mónica hoy pueden mover su cuerpo, caminar y hablar.
“Me siento muy agradecida antes que nada con los médicos que están en el preciso momento que deben estar para una oportunidad más de vida. Desde que ingresé fue muy rápida la atención, el tratamiento y el tiempo que hice en la UCI, los enfermeros muy amables y empáticos con la situación que yo estaba pasando. Le digo a todas las personas que tenemos el tabú de que el Hospital público no te atiende bien, pero es falso, yo puedo decir hoy que por ellos estoy aquí”, finalizó doña Mónica.
El titular del IMSS Yucatán, doctor Alonso Juan Sansores Río explicó que esta estrategia coordinada en los tres niveles de atención: Unidades de Medicina Familiar, Hospitales y Unidad de Alta Especialidad (UMAE), cuenta con un procedimiento de intervención sistematizado, rápido y homogéneo en todo el país, con la finalidad de priorizar los tiempos de atención para mejorar el pronóstico de las y los pacientes con un EVC y, así continuar brindando atención con calidad y calidez a la derechohabiencia en el estado de Yucatán.
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