Mérida, Yuc.- La tarde-noche del martes un hombre de 71 años de edad, identificado como José G. C., fue encontrado muerto y con huellas de violencia en varias partes del cuerpo en el interior de su predio que se ubica en la calle 59-A por 76 y 78, en el tradicional pero también manchado por el crimen, Barrio de Santiago.
Este famoso lugar es una zona en la que la mayoría de sus habitantes son personas de la tercera edad que viven solas o son extranjeros jubilados.
El asesinato mencionado es el último de una lista de crímenes que han ocurrido en esta zona habitacional del centro meridano, entre los que destacan casos como el de la esquina conocida como “La Jardinera”, calle 65 por 72, cerca de la ex fábrica de la “Sidra Pino”, donde el 23 de febrero de 1976 el carpintero José C. M. P. asesinó a martillazos y con un formón a tres miembros de la familia Poveda Ricalde, todo debido a una deuda que el ebanista había adquirido con Eneida Ricalde de Poveda, quien era prestamista.
Otro caso es el del despacho del licenciado Armando P. R., en la calle 70 por 53 y 55, ocurrido el 24 de mayo de 1993, donde fueron asesinados a balazos el abogado, su asistente y su secretaria.
También destaca aquí el crimen ocurrido contra Elda Z. A. de R. y su hija Cinthya, en su casa en el cruce de la calle 57 por 68, el 22 de agosto de 1999, cometido por miembros de la familia Méndez Angulo, de origen tabasqueño, campechano y chiapaneco.
Sin pistas de los asesinos
Sobre este nuevo asunto, ocurrido el martes pasado, la Fiscalía General del Estado indicó que se inició una carpeta de investigación en base a la denuncia interpuesta por familiares del occiso por el delito de homicidio calificado.
Los parientes refieren que el ahora occiso no era prestamista y que trabajaba en una lavandería cercana a su domicilio, padecía de ataques epilépticos y pérdida de memoria (demencia senil).
La Policía Estatal de Investigación realiza las pesquisas para la identificación de los atacantes de este septuagenario, en el que la línea principal del móvil pudiera ser el robo, ya que no se descarta el agiotismo.
También se verifican las cámaras de videovigilancia en la zona donde ocurrieron los hechos, que permita la identificación del los sospechosos. Sin embargo, aún no hay datos de los asesinos. Información Sipse.com