La propietaria y sus nietos lograron escapar de las llamas
El fuego consumió anoche todo lo que había en el interior del predio de doña Gloria María Uribe Caamal, de aproximadamente 60 años de edad.
Uno de los vecinos de las casa de enfrente señaló al POR ESTO! que salió a la calle a tomar el freso cuando vio cómo empezaron a brotar del predio las lenguas de fuego, intentó entrar a la casa marcada con el número 485, ubicada sobre la calle 73-A entre 50 y 52 del Centro de la ciudad, pero el perro de la casa le impidió acceder, por lo que el señor empezó a gritar para que los niños y la señora salgan a la calle, porque si no el humo los iba a asfixiar, por lo que increpó a la señora y a sus tres nietos hasta que estos salieron.
Las llamas crecieron y las lenguas de fuego consumieron todas las pertenencias de la familia Durán Uribe, sin embargo, la señora Gloria y sus nietos estaban a salvo. Al sitio se presentaron varia patrullas de la Policía Municipal de Mérida, así como de la Estatal y las unidades de bomberos 862, 848 y 2135 de la Secretaría de Seguridad Pública, junto con la ambulancia YUC-50 de la Cruz Roja, a cargo del Técnico en Urgencias Médicas (TUM) Gabriel Arana.
Los bomberos controlaron las llamas en poco tiempo, pero lamentablemente todo lo que había dentro de la casa se quemó, sin embargo, la rápida movilización de los bomberos evitó que el fuego se propague a predios aledaños, evitándose que otras familias perdieran todo su patrimonio.
Al sitio llego el marido de doña Gloria, que tal vez molesto por lo que pasó no quería proporcionar datos a las autoridades, según porque ya los dio su esposa y se mantuvo en esa posición.
El perro de la casa siniestrada no sufrió lesión alguna, al igual que una tortuga, que es la mascota de los nietos, según dijeron los vecinos.
De acuerdo con el vecino que ayudó a salir a los niños y a la señora, fueron los dos más pequeños quienes ocasionaron el incendio al estar jugando con cerrillos, mientras la abuela permanecía con el más grande en el fondo de la casa, por lo que no vieron qué estaban haciendo los menores hasta que el vecino les gritó para que salgan.
La señora se lamentaba mucho de los hechos porque no pudo salvar su patrimonio, además de que el calor del fuego le afectó un brazo, aunado a la crisis nerviosa que presentó, por lo que fue atendida por paramédicos de la Cruz Roja, sin embargo, no amerito traslado al hospital.
La madre de los menores, hija de doña Gloria, se encontraba trabajando junto con su marido, dijeron los vecinos, aunque no quisieron dar los nombres, por lo que cuando regresen de laborar se iban a encontrar con todo lo que había en interior de la casa quemado, además de que ya su madre no podrá seguir habitando el predio, ya que al parecer los techos se cuartearon, por lo que ya no tiene donde vivir la señora, quien cuida a sus nietos mientras su hija y su marido trabajan.
Fue un gran despliegue de los servicios de emergencia para evitar que otras casas resulten dañadas por el fuego. En cuanto a los bomberos, al preguntárseles sobre alguna causa posible del incendio, estos dijeron desconocerla, ya que cuando llegaron el predio estaba en llamas.