Tras sentirse “ofendido”, Christian Uriel denunció a su madre y a su tía ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México por agresión y hostigamiento, luego de que lo corrieron de la casa.
Al ser citada por las autoridades, la madre contó que no aguantó más a su hijo de 30 años por ser un supuesto “nini”, (que no estudia ni trabaja).
Detalló que, durante la pandemia de COVID-19, Christian permaneció sentado en un sillón y jugando videojuegos, además le pedía que todo le sirviera en el lugar.
Cuando la ciudad se reactivó, la madre le pidió a su hijo que considerara trabajar, para que le ayudara con los gastos de la casa, sin embargo, Christian Uriel se negó y siguió con el mismo estilo de vida.
De acuerdo con la carpeta de investigación, FIIZP/IZP-9/UI-1S/D/0720/09-2020, la progenitora pidió ayuda a una familiar, y juntas llegaron a su domicilio ubicado en la colonia La Polvorilla, de la alcaldía Iztapalapa.
Como era de esperarse, encontraron a Christian sentado en el sillón, ambas mujeres le echaron agua fría y lo agarraron a escobazos hasta sacarlo de su vivienda.
Por lo anterior, el hombre se ofendió y para poder regresar a su casa, acudió al Ministerio Público a pedir ayuda.
Con información de El Universal