Mérida, Yucatán.- Para brindar un sistema de readaptación social que garantice un estado más seguro, se realizó la capacitación de personal de los diferentes centros penitenciarios de Yucatán.
Visibilizar lo que no se ve del régimen carcelario significa una labor de grandes esfuerzos y responsabilidades para mantener las condiciones de seguridad en Yucatán, y es parte de la visión del Gobernador Rolando Zapata Bello de hacer todo lo pertinente para ello, manifestó la secretaria General de Gobierno, Martha Góngora Sánchez.
Al inaugurar la formación dirigida a profesionales de la abogacía y la psicología, así como a la plantilla administrativa de los diferentes Centros de Reinserción Social (Cereso) de la entidad, la funcionaria destacó que esta iniciativa es también compartida por las direcciones de dichas sedes.
A diferencia de otros sitios del país, en Yucatán la paz que gozamos es producto del trabajo de todas y todos los empleados, pero también de la proyección del mandatario estatal para generar las acciones con la finalidad de contar con un sistema penitenciario seguro, sostuvo.
Asimismo, indicó que esta estrategia es pieza fundamental de un proceso que ha permitido que el Cereso de Oriente en Ebtún, municipio de Valladolid, el del Sur en Tekax, el Femenil de Mérida y el Centro Especializado en la Aplicación de Medidas para Adolescentes (Ceama) obtengan la acreditación que otorga la Asociación Norteamericana de Correccionales (ACA, por sus siglas en inglés).
En su intervención, Paulino Dzib Aguilar, director de la Clínica en Justicia Terapéutica donde se impartió el adiestramiento, señaló que estos cursos son parte de un plan integral del Gobierno del Estado para atender las necesidades del rubro.
“Hoy se culminó una primera fase que fue invertir en infraestructura con la certificación de los Centros y capacitación para el personal. Pero también consistió en la evaluación a 320 internos del penal de Mérida en el cual obtuvimos indicadores donde predominan los delitos de medio impacto, como robo en sus diferentes modalidades”, dijo.
Agregó que estos instrumentos de medición serán válidos y confiables para aplicarlos a los procedimientos legales o buscar patrones de reincidencia. También manifestó que la segunda etapa será desarrollar un software para ordenar y coordinar el uso de esa información para generar índices locales.