Hoy, 28 de agosto, se cumplen 6 meses del registro del primer caso de coronavirus en México; periodo durante el cual ha muerto 62 mil 598 mexicanos a causa de este virus.
El pasado 28 de febrero, la Secretaría de Salud confirmó el primer caso de COVID-19 en el país; se trató de un hombre de 35 años de edad, quien fue aislado en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER).
Al mismo tiempo, existía una persona sospechosa aislada en un hotel de Sinaloa, quien dio positivo a la primera prueba reactiva.
En la conferencia matutina en Palacio Nacional, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell detalló que el paciente, se mantenía estable.
“En el INER detectamos un caso en el que existía una prueba reactiva y estaba pendiente la segunda prueba de la que se tuvieron los resultados a las seis de la mañana. Es el caso índice de coronavirus. El paciente no tiene neumonía, es un individuo joven, se localizó a cinco contactos que están en análisis, toda la familia está en aislamiento y no necesitarían estar hospitalizados, pero se quedan aislados para cumplir este procedimiento normado”, explicó.
Después de que confirmó el primer caso de coronavirus en México, López-Gatell aseguró que el coronavirus “no es una enfermedad grave. En su mayoría, son casos leves; leves quieren decir, los síntomas de un catarro, son indistinguibles de un catarro. En la gran mayoría, la mortalidad es sumamente baja, sin consideramos el enorme volumen de personas infectadas”.
Además, aseguró que no estaría “en el contexto de una emergencia nacional ni tampoco en ele contexto de una emergencia de salud”.
Ante esta declaración de López-Gatell, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), presidente de México, manifestó que el país estaba preparado para enfrentar la situación de la COVID-19.
“Decirle a la gente, serenos, tranquilos, tenemos capacidad para enfrentar esta situación. Porque no es, repito, según la información que se tiene, algo terrible, falta, ni siquiera es equivalente a la influenza”, expresó.
Más tarde, el 16 de marzo, López Obrador declaró que suspendería sus giras por el país hasta que López-Gatell se lo indicara.
“Él me va a decir cuándo no sea conveniente que me reúna con mucha gente o que ya no debería ir a esos actos (las giras), ni saludar ni dar abrazos, ni besos, ni nada, él me va a decir cuándo”, dijo el mandatario dando un abrazo al subsecretario.
Mientras que López-Gatell aseguró que el presidente López Obrador es una fuerza moral y no de contagio del coronavirus.
“La fuerza del Presidente es moral, no es una fuerza de contagio. En términos de una persona o de un individuo que pudiera contagiar a otros, el Presidente tiene la misma probabilidad de contagiar que tenga usted o que tenga yo. El Presidente no es una fuerza de contagio, no tiene por qué ser una persona que contagie a las masas o al revés”. Información Radio Fórmula