Las personas presentan traumatismos por las enormes bolas de granizo, caídas y vidrios rotos; también hay daños en autos, techos, árboles y cultivos
El fuerte temporal con granizo de grandes dimensiones, lluvia y vientos de más de 140 km/h que azotó el Véneto —noreste de Italia—, dejó saldo de 110 heridos por el impacto de las bolas de hielo, del tamaño de pelotas de tenis, y la caída de cristales rotos, informó la región en un comunicado.
“Se eleva a 110 el número de heridos con traumatismos por granizo, caídas y rotura de cristales. Una vez más agradezco a los rescatistas y técnicos que intervinieron inmediatamente después de los hechos y que continúan en estas horas con los trabajos de restauración y censo de daños”, aseguró en un comunicado el presidente de la región, Luca Zaia.
El viento y el granizo, que llegó al tamaño de pelotas de tenis, provocaron además importantes daños materiales en vehículos, techos, árboles de zonas urbanas, invernaderos, cultivos y bosques, según los medios locales.
“Solo en el bosque de Cadore (en el límite con Austria) un torbellino ha derribado cientos de árboles que necesitarán 30 o 40 años para recuperarse, mientras que el granizo ha arrasado prados y pastos”, lamentó la principal asociación de agricultores de Italia, Coldiretti, en un comunicado.
Desde primera hora de la mañana, las autoridades de la región comenzaron con los trabajos de restauración y cuantificación de los daños económicos causados por el temporal, agregó el presidente de la región.
Durante toda la noche, los bomberos —que necesitaron refuerzos de otras regiones italianas—, recibieron más de 350 llamadas de auxilio e intervinieron de urgencia en la tala de árboles caídos que bloqueaban las calles; también retiraron cristales rotos que podían poner en riesgo la seguridad de las personas.
Las incidencias se repartieron por diversas provincias de la región, entre ellas Venecia, donde 28 personas fueron atendidas por los servicios de urgencias, mientras que en Verona se intenta recuperar la normalidad en el servicio telefónico, dañado por el temporal.
La violenta tempestad impactó en la región en plena ola de calor en Italia, que disparó los termómetros a temperaturas nunca vistas en muchas zonas del país y que ha supuesto el ingrediente clave para la formación de la tormenta.
El fenómeno meteorológico que conmocionó al Véneto se llama “downburst”, un evento climático típico de los países subtropicales y que se crea cuando las corrientes de una tormenta se encuentran con aire caliente, lo que genera precipitaciones muy violentas y fuertes rachas de viento.
Mientras tanto, en el centro y el sur del país de ciudades como Roma, Bolonia, Florencia, Nápoles y Palermo se mantienen en alerta roja por el calor extremo, con temperaturas que podrán superar por tercer día consecutivo los 40 grados. Información Nmás
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