CIUDAD DE MÉXICO.
Viajar en avión es lo peor. Ya lo hemos dicho varias veces, como cuando una bolsa en un avión estalló en llamas en febrero, y cuando en otro toda la tripulación vomitó, y cuando otro se llenó de humo hace unas semanas, y así una y otra vez, y sin embargo, vale la pena repetirlo: viajar en avión es lo peor. Pero justo cuando pensabas que no se podía poner peor, lamentamos informarte sobre esta atrocidad que aún nos cuesta trabajo creer: el jueves, según la afiliada de Fox, KDVR, un pasajero en un vuelo de Frontier orinó todo el asiento frente a él.
El culpable estaba volando de Denver, Colorado, a Charleston, Carolina del Sur, ahogado de borracho, según un pasajero a bordo, cuando presuntamente manoseó a la mujer que estaba en el asiento de al lado.
“Escuché a una mujer gritar, ‘Si este hombre me vuelve a tocar, lo voy a matar'”, dijo una pasajera llamada Emily, que no le quiso decir su apellido a KDVR. “Dijo que el hombre había pedido dos dobles de vodka, o sea cuatro bebidas en total mientras estaban sentados ahí. Que estaba como loco. Que no podía ni hablar, estaba balbuceando. El hombre estaba extremadamente intoxicado”.
Un pasajero le dijo a CBS Denver que el hombre también acosó física y verbalmente a dos mujeres sentadas cerca de él. En un momento dado, dijo el pasajero, tocó a una mujer que estaba durmiendo; más tarde, supuestamente le preguntó a otra sobre su vida sexual.
Según los informes, los asistentes de vuelo arrastraron al tipo desde su asiento hasta una fila vacía en la parte trasera del avión, directamente frente a Emily. Fue entonces cuando, le dijo a KDVR, se desabrochó el cinturón de seguridad, se lo sacó y empezó a orinar sobre el asiento frente a él. En lugar de hacerse para atrás con disgusto, Emily valientemente sacó su teléfono y le tomó una foto. Luego, la CBS Denver obtuvo una imagen de Emma Kerbstdat que mostraba el horror que tuvieron que soportar los pasajeros:
“Y grité: ‘Está orinando. Dios mío'”, le dijo Emily a KDVR. “Y la azafata en lugar de decirle algo a él, me dijo: ‘Tiene que calmarse y dejar de maldecir'”.