POr Enrique Aranda
Superado el debate sobre la viabilidad de su eventual postulación a ser reelecto como titular del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, Álvaro Augusto Pérez Juárez parece marchar hacia su ratificación, este viernes, en la presidencia del organismo, a merced del mayoritario consenso en su favor, conseguido durante un primer periodo en la posición.
Al cierre de la semana, efectivamente, el magistrado presidente intentará capitalizar los avances en materia de actualización-optimización del sistema de justicia capitalino e, igualmente, las ambiciosas propuestas para seguir avanzando en tal sentido que, presumiblemente, desglosará en la exposición privada que, como quienes con él compiten por la posición: Manuel E. Díaz Infante, Rafael Guerra, Rosalba Guerrero y Celia Marín Sasaki, deberá realizar ante el pleno del organismo, en sesión programada para este jueves.
Promover una reforma legislativa que permita dar sustento al uso del expediente digital, el uso de la firma electrónica y para que en su oportunidad se puedan realizar juicios en línea; concluir la implementación del sistema de capacitación en línea (Moodle) que permitirá contar con módulos de evaluación, generación de certificados y videoteca en línea, más la consolidación de la llamada Ciudad Judicial que por su ubicación facilita el acceso de usuarios y empleados del sistema, son algunas de sus propuestas.
Ello, obvio, además de la previsión de optimizar la operación del sistema procesal acusatorio con la incorporación de al menos 40 jueces más y la creación de cuatro Unidades de Gestión Judicial —tres de control y enjuiciamiento y una de ejecución de sanciones—, así como la implementación de kioskos electrónicos para el registro y control de personal con beneficio de medidas cautelares.
Vale recordar, en abono de la gestión que nos ocupa, que la misma se concretó con un presupuesto reducido —cinco mil 889 millones, contra los 15 mil 257 solicitados al cierre de 2017— pese a lo cual se pudo garantizar la continuidad de la operación haciendo esfuerzos para obtener recursos adicionales del gobierno capitalino, para posibilitar la impartición y administración de justicia.
A la vista de lo anterior y, obvio, de quienes promueven la eventual reelección del presidente Pérez Juárez, ésta deberá darse con el apoyo mayoritario de los integrantes de la Sala Superior que el viernes deberán emitir su voto que, huelga recordar, posibilitará que por última ocasión se concrete la permanencia de un presidente en la posición dado que, como de sobra se sabe, la nueva Constitución Política de la Ciudad de México que entrará en vigor en junio próximo, en su artículo 35, cancela de manera explícita tal posibilidad.
Al pendiente pues.
ASTERISCOS
* Ahora sí que, contra todo pronóstico, el debate sobre las negativas consecuencias económicas y sociales que, previsiblemente, traerá aparejeada la decisión de Andrés Manuel López Obrador de cancelar las obras del nuevo Aeropuerto en Texcoco no sólo no ceja, sino que se mantiene “a todo lo que da…”, involucrando ahora a los opositores a que el mismo se edifique en la base militar de Santa Lucía.
* Si bien en un primer momento se dio, prácticamente, por goteo, ya ayer tarde, el flujo de centroamericanos —hondureños la mayoría— integrantes de la caravana migrantes que avanza hacia la frontera norte era, por decirlo de algún modo, un flujo intermitente… que forza al gobierno del neomoreno José Ramón Amieva a activar el protocolo de apoyo diseñado.
* En el marco de una ceremonia litúrgica encabezada por el arzobispo primado, cardenal Carlos Aguiar Retes, ayer asumió la dupla de cuya decisión dependerá el futuro de la emblemática Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe: el nuevo rector Salvador Martínez Ávila y el canónigo Gustavo Watson Marrón en calidad de vicerrector.
Veámonos el miércoles, con otro asunto De naturaleza política.
Twitter:@EnriqueArandaP
Información Excelsior.com.mx