El 8 de noviembre del 2019, en medio de deudas, controversias y polémicas por sus manejos laborales, el Club Tiburones Rojos de Veracruz, entonces propiedad de Fidel Kuri Grajales, disputó su último partido en el Estadio Luis “Pirata” Fuente, un inmueble construido en la década de los 60, que pertenece al gobierno del estado y que estuvo en el abandono los últimos tres años.
Un mes después del aquel juego en viernes, en el cual cayeron por goleada 5-0 ante el América, la Federación Mexicana de Futbol (FMF), decidió desafiliar al equipo debido a todos los problemas extra cancha que arrastraba, y desde entonces el Pirata Fuente cerró sus puertas. Quedó en el olvido, desatendido y solo fue utilizado en las jornadas de vacunación contra el covid 19 en septiembre del 2021 y marzo del 2022.
Con la intención de que regrese el futbol al puerto, a principios de este mes de febrero el gobierno estatal anunció el comienzo de la remodelación de la dañada y deteriorada casa del equipo veracruzano. El objetivo tendrá un costo de 400 millones de pesos, de acuerdo a José Luis Lima Franco, titular de la Secretaría de Finanzas y Planeación de la entidad.
“Lo que se ha planteado son 400 millones de pesos y ya está iniciando el contratista la rehabilitación del estadio. Son 400 millones y la inversión es para una primera etapa en la que buscamos que el estadio esté en condiciones para poder jugar futbol. Eso sería suficiente para cumplir con lo que pide la Federación Mexicana de Futbol”, dijo en entrevista telefónica para mediotiempo.
¿El futbol regresará a Veracruz?
El funcionario dijo que el plan es que una franquicia de la Liga de Expansión MX pise el puerto en el corto plazo, y para ello comentó que varios empresarios han mostrado interés de regresar al balompié profesional a territorio jarocho y están en pláticas con la Federación Mexicana de Futbol para concretarlo.
Agregó que si bien la remodelación del inmueble arrancó gracias a un programa de salud enfocado en el deporte, aprovecharán la inversión para dejar el estadio en condiciones para que se pueda volverá a jugar.
“No fue bajo ese objetivo, pero aprovechando que se hará la rehabilitación ver la posibilidad que regresara el futbol a Veracruz y se ha venido platicando. Varios empresarios han estado interesados en traer futbol a Veracruz. Es un tema que depende de los empresarios y la FMF”, señaló.
“Se ha planteado en Liga de Expansión, pero ese tema lo tendrán que ver con la FMF y de nuestra parte dar las facilidades para entregar el estadio en comodato a los empresarios que pudiera traer de vuelta el futbol a Veracruz”.
Dijo también que la obra es importante ya que de no hacerse la estructura corría el riesgo de desplomarse, y al ser un bien público, el gobierno estatal no podía dejar caer uno de los edificios más emblemáticos del puerto jarocho.
“Es un edificio, es un bien público, estructura deportiva del estado y había que darle mantenimiento de lo contrario se podía caer, y ese fue el primer elemento por lo que se decidió remodelarlo, no dejar caer un bien público”, concluyó. Información Medio TIempo