Trágico final de festejos para un joven alcoholizado
Peto.— Tremendo susto se llevó José Sadam Heredia Caamal, de 30 años de edad, cuando se percató de que la cama de la camioneta que manejaba había una persona muerta.
El conductor declaró a la policía que no se había dado cuenta de que había un cuerpo recostado en la parte de atrás del vehículo.
Según el reporte, a las 9:24 de la mañana la policía recibió la información de que había una persona sin signos vitales abordo de una camioneta Ford Lobo negra, placas 950-SRH, en la calle 51 entre 28 y 30 de la colonia Francisco Sarabia, de modo que los encargados de la unidad 1155 se dirigieron a verificar.
Los uniformados se entrevistaron con el conductor de la camioneta y tras confirmar que la persona que estaba en el vehículo estaba muerta, procedieron a acordonar el área y reportarlo a la Fiscalía.
Poco después se acercó al lugar Candelario Puc, de 54 años de edad, quien es vecino de la calle 30 entre 47 y 49 de la misma colonia, e identificó el cadáver como el de su hijo.
El señor Puc dijo que su hijo se llamaba Edwin Guadalupe Puc Ku y que tenía 26 años de edad.
De cuerdo con la policía, el joven se embriagó anoche con unos amigos en una fiesta. En un momento dado empezó a mostrar cansancio y sus compañeros, al ver que se estaba durmiendo, lo recostaron en la camioneta, que en esos instantes estaba estacionada.
Por eso Heredia Caamal no sabía nada, de modo que confiado condujo el vehículo varias calles, hasta que se percató de que había una persona en la parte de atrás y se dio cuenta de que estaba muerta. Acto seguido reportó el hallazgo a la policía.
A las 11:10 de la mañana llegó el médico forense de la Fiscalía, Simiri Caamal Ku, quien determinó que la causa del fallecimiento fue “muerte cardíaca súbita secundaria”, ocasionada por consumo excesivo de alcohol. Información Diario de Yucatán